Setenil Rural: Los Sucesos de Setenil: Septiembre de 1901

Rescatamos hoy unas noticias que aparecen en el periódico La Vanguardia de principios del mes de Septiembre de 1901, donde con el sugestivo título de “lo de Setenil”, se da cuenta de unos graves sucesos que llegan a ocasionar muertos y heridos en nuestro pueblo.
Reconozco que la falta de información sólo me permite transcribir la noticia tal cual, comentarla y sacar conjeturas dentro del contexto regional, pues pese a que he buscado datos en la red y en monografías especializadas, nada más he encontrado por ahora que pueda dar luz a estos sucesos.
En los días 2 y 3 de septiembre, en la sección de teletipos del periódico La Vanguardia, se insertan unas conferencias telefónicas de los corresponsales donde se puede leer lo siguiente:
"Lo de Setenil
Cádiz, 1.—Se tienen noticias de que ha
renacido la tranquilidad en Setenil.
Se teme que con motivo del entierro de la
víctima se reproduzcan los desórdenes.
Algunas mujeres repelieron la agresión.
Otras arrojaron piedras desde las azoteas.
Se dieron órdenes de concentrar la guardia
civil de los pueblos inmediatos.
El gobernador ha multado al alcalde por el
retardo con que comunicó los sucesos ocurridos
en el pueblo.
La autoridad militar está instruyendo el
sumario.
Hace años ocurrió un suceso análogo en Setenil
2.—Lunes 2 Septiembre 1901 La Vanguardia"

Al día siguiente los teletipos vuelven a informar sobre el asunto de esta forma:

"El teniente de la guardia civil señor Alverá comunica detalles de los desórdenes de Setenil.
Llegaron á dicho punto, dice, 16 carabineros mandados por un teniente, quien pidió permiso al juez para reconocer dos casas, por considerarlas sospechosas.
Concedióse el permiso y empezaron el reconocimiento varios carabineros, estando
los restantes á la expectativa.
Esto era en las primeras horas de la mañana, cuando los trabajadores se hallaban reunidos en la plaza del pueblo y las mujeres se dirigían al mercado.
Surgió entre el vecindario una protesta contra los carabineros y poco tardó en
adquirir el suceso caracteres alarmantes.
Los carabineros, al oír las voces y amenazas, cesaron en el reconocimiento y se
replegaron haciendo disparos contra las casas sospechosas.
El Alcalde y un cabo de la guardia civil llamado Duran salieron hacia los carabineros
con los brazos levantados para que suspendieran el fuego.
Los carabineros se dirigieron al campo tomando posiciones, y allí permanecieron
una hora.
De la refriega resultó muerto el vecino Juan Bautista Roque, y heridos los paisanos
Juan Rubio, María Margallo y María Cueto. Todos se hallaban en sus casas.
Se encuentra en Setenil el coronel de carabineros instruyendo sumaria.
LA. VANGUARDIA Fagina a.—Martes 3 Septiembre 1901
«El Imparcial»
Madrid, 3, 10'45"
Evidentemente, el primer teletipo fechado en 2 de septiembre cuenta la noticia, que bien pudo haber sucedido uno o dos días antes, mientras que la segunda noticia, de 3 de septiembre, ahonda en los hechos mediante los informes que pasan las autoridades, en concreto el Teniente de la Guardia Civil Alverá.
Como vemos se trata de un violento acto represivo de un contingente de carabineros sobre una protesta de civiles en el mismo casco urbano de Setenil, y que de no ser por la mediación del propio Alcalde y por el Cabo Durán del puesto, seguramente hubiera acabado en una masacre, tratándose como dice la noticia de un hecho reiterativo en el pueblo, pero ¿Cual es el motivo para que tengan que intervenir las fuerzas de orden público de modo tan expeditivo?
Tratando de encontrar más datos he buscado en diversas monografías sobre el movimiento obrero en la Sierra de Cádiz, muy acentuado desde el último tercio del siglo XIX hasta la Guerra Civil, con bastantes momentos calientes. En concreto destacamos los graves sucesos de Alcalá del Valle de 1903, que son relatados de esta manera por la Wikipedia:
"La falta de información concerniente a la Edad Moderna se puede explicar a raíz de los denominados Sucesos de 1903, debido a que fueron incendiados los archivos del Ayuntamiento y los papeles del Juzgado. Sólo quedó el archivo parroquial, siendo el libro más antiguo el de Registros de Nacimientos, que data de 1546.
El 1 de agosto de 1903, la masa jornalera de Alcalá del Valle respondió de huelga general convocada por la Federación Regional Española de Sociedades de Resistencia, en apoyo a todos los presos españoles condenados por razones sociales. Un grupo de quinientos o seiscientos obreros y campesinos se concentró en las afueras del pueblo, en el lugar conocido como Puente Palo, acompañado de mujeres y niños. En un momento de la concentración, los obreros mantuvieron un enfrentamiento con la Guardia Civil, resultando muerto un joven de 15 años conocido como "El Pelúo". Tras esto, la revuelta se recrudeció, incendiándose los archivos del Ayuntamiento y el Juzgado Municipal. Con la llegada de nuevos efectivos policiales y fuerzas militares se volvió al orden dentro de un clima de tensión, siendo detenidos más de cien alcalareños, que en su mayoría fueron trasladados a la cárcel de Ronda.
Los malos tratos y torturas sufridos por los jornaleros detenidos saltaron rápidamente a los medios de comunicación, ocupando primeras planas de los principales periódicos anarquistas y republicanos. El presidente del gobierno Antonio Maura sufrió un atentado fallido en Barcelona el 12 de abril de 1904 de manos de un joven anarquista que pretendía vengar a los presos de Alcalá del Valle.
La repulsa del movimiento obrero internacional fue unánime y siguió con atención el desarrollo de los hechos relacionados con estos presos y exigió su puesta en libertad inmediata. En 1909, el pedagogo anarquista Francisco Ferrer Guardia comenzó una campaña exigiendo la libertad inmediata de los seis presos que aún sufrían condena. El 24 de junio de ese mismo año recibieron el indulto cinco de esos presos, mientras que el sexto había fallecido poco tiempo antes en prisión".
Como vemos se trata de unos hechos gravísimos que daban fe del polvorín que suponía la precariedad laboral y las condiciones de vida de los jornaleros de la serranía. Así, durante principios de siglo son continuos los motines, las huelgas y altercados con las fuerzas de seguridad en toda la provincia, no quedando nuestro pueblo ni mucho menos al margen de esta tendencia. Setenil aparece dentro del mapa del asociacionismo obrero gaditano, primero anarquista y luego socialista, que organizados en juntas de defensa obrera, inician la lucha contra unas precarias e injustas condiciones de vida. En próximas entradas hablaremos de este intenso movimiento obrero setenileño, cuales fueron sus formaciones, sus líderes, sus actividades y lo que es más importante; el origen y las causas que lo provocan. Hoy sin embargo, y volviendo a los sucesos de Setenil, me aventuro por mi cuenta y riesgo a pensar que lo sucedido en este septiembre de 1901, pese a guardar una evidente relación con las condiciones de vida de las clases más desfavorecidas, no puede ser considerado como resultado del incipiente movimiento obrero de la serranía.
Según mi opinión, el hecho de que las fuerzas de seguridad se dedicasen a registrar las casas sospechosas, y de se trate de un destacamento de carabineros los que realizan esta labor, nos da que pensar que bien podríamos estar ante un asunto de contrabando, pues era este cuerpo el encargado de la lucha contra este tipo de delitos y del control de fronteras y aduanas.
Así, de este modo, las mujeres defienden a pedradas sus casas de la inspección, con la consiguiente y desorbitada reacción de los carabineros, mientras que las autoridades locales, quizás conocedoras del negocio de sus paisanos, que más beneficio que daño podía ocasionar en la vida cotidiana setenileña, tienen que intervenir para evitar males mayores. Por otro lado, queda patente la multitudinaria reacción de la población setenileña, lo cual demuestra que lejos de tratarse de un hecho marginal, se trata de una auténtica causa común. El contrabando podía tratarse de la única forma de vida de muchas familias.
Al final, un muerto y varios heridos, y la consiguiente intervención de la Guardia Civil, un cuerpo con más disciplina militar y más tablas en estos asuntos para controlar la situación.
Que “lo de Setenil” se trate de un asunto de contrabando y no de lucha obrera, a parte del tema de los carabineros, se intuye por la poca repercusión que hay de estos sucesos en las noticias, así como su inexistencia en el amplio espectro de estudios que hay sobre el tema. Se debió tratar pues de un asunto menor que no tenía la más mínima repercusión política, aunque como digo todo queda en el aire mientras no encontremos más datos sobre los hechos. De todas formas, e independientemente de las orígenes de esta revuelta de setenileños y la violenta reacción de las fuerzas del orden publico, se trate de un asunto político o de contrabando, en el fondo subyacen las mismas causas; el hambre y la miseria de las clases más desfavorecidas.
Un interesante asunto sobre el que tendremos que seguir hablando.