viernes, 17 de febrero de 2012

Antiguas casas de Setenil (III): El antiguo casino


Casino, establecimiento de venta de tejidos, tienda de las lanas, hasta hoy día, cuando convertida en una vivienda moderna, mantiene su condición comercial.
Así se veía a finales de los años ochenta esta antiquísima vivienda situada al inicio de la subida al pecho de la Plaza, hoy Calle Constitución, con la misma fisonomía que esa famosa instantánea donde luce con bandera en su balcón principal y corrido de señores sentados en la terraza de la puerta, así como tantas fotos donde se retrata el paso de una comitiva de boda, los tronos un Viernes Santo o cualquier otra celebración. No hay que olvidar que estamos en una de las arterías principales de Setenil y lugar de paso obligado.
Recuerdo esa casa con su escaparate de cristal colgado en la pared, la fachada blanca sin zócalo y porticada con dinteles dieciochescos, el sanjuán, los tres balcones con sus enrejados de forja y un interior amplísimo con patio incorporado. Durante décadas fue comercio textil y vivienda de Sebastián Porras y Encarnación Villalón, tíos abuelos míos, así que exploré a conciencia esos salones llenos de muebles antiguos, fotografías familiares y de época (incluida una de las mejores colecciones del fotógrafo rondeño Miguel Martín, del que eran cuñados) y estanterías desbordadas de libros, donde destacaba un Cossio de notables dimensiones, fruto de la afición taurina del comerciante.
El local, al que se accedía por una puerta contigua, era un auténtico museo de piezas antiguas de pesos y medidas, con un larguísimo mostrador de madera, las estanterías y las vitrinas de cristal, donde se exponían toda clase de productos textiles.
En el patio del interior, un Rafalillo de unos siete años, aprovechando la familiaridad con la que entraba y salía de la casa, abrió la enorme jaula en la que tenían su morada decenas de canarios de todos los colores que salieron disparados en busca de la libertad, para regocijo general de una jauría de chavales que nos esperaban en la calle y el lógico mosqueo de los propietarios. Las cosas de los niños.
Tanto por dentro como por fuera, aquella casa resultaba un rincón antiguo y vetusto de Setenil que hoy ya sólo permanece en nuestra memoria.

2 comentarios:

  1. La hemos encontrado y a quien le pertenece a mediados del siglo XVII.
    Jesus

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  2. Bueno, yo sólo llego hasta principios del XX, quizás incluso desde mediados del XIX, que pertenece a una rama de la familia Guzmán, pero sólo de oídas.

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